sábado, 8 de agosto de 2020

LI

 Un largo tiempo.


Los años pasan con una velocidad que no da tiempo para más que pensar bien en cada decisión que se toma. Por supuesto, fallar y cometer errores está en parte de esta carrera en contra de la muerte, la cual se acerca sigilosamente sin tener piedad de nadie. Tras la muerte de mi amiga y casi madre Barbro las cosas cambiaron de una manera impredescible e inexplicable. Más para bien que para mal las cosas se habían ido dando, y finalmente tomé decisiones de las cuales no me arrepiento, en su mayoría.

Dar por terminada una vieja e inexistente relacion que sólo dio mas dolores de cabeza que dichas pude despegar. El proceso de divorcio fue sumamente doloroso, no en el sentido sentimental, puesto que esa relación no mantenía ningún tipo de vínculo de ese tipo, sino mas bien por todos los problemas que ésto desencadenó. Posibles deudas, posibles querellas, posibles denuncias y cosas similares salieron a la luz durante un año y medio de lucha por los derechos que me habían sido negados desde el comienzo. Estar atado a una persona la cual sólo encuentra valor en lo material y en lo monetario desgasta incluso hasta al más paciente, y yo ya había estado cansado de una relación en donde yo no valía nada más que mi saldo en el banco.

Tras años también de vivir separado por supuesto que deseaba un cambio. No quería seguir siendo la sombra de nada ni de nadie. Por fortuna encontré un puesto de trabajo con una jefe maravillosa, y así poco a poco levanté el vuelo, hasta que decidí que debía centrarme más en aprender idiomas.  Y así fue.  Tras mejorar notoriamente mi nivel de inglés en tiempo récord hasta un nivel alto comencé a buscar a su vez personas que me enseñasen japonés.  Conocí una inmensa variedad de sujetos con una gran variedad de intenciones, aprendí un poco más acerca de la cultura japonesa y me encaminé en una relación que nunca debió ser.

Era un hombre de secretos, extraño y algo violento. Me dio la oportunidad de conocer más su país. Viajar y ver lo que sé que nadie nunca más me volverá a mostrar. No soy desagradecido, por supuesto que agradezco aquello, sin embargo él se tornó posesivo y parecia que todo le molestaba.  Por fortuna yo aún vivía en Finlandia, y tras encontrarnos por segunda vez él comenzó a mostrar su veradera cara. siempre molesto parecía querer gritar por cosas sin mucha importancia. Se molestó conmigo por ser tan físicamente fuerte, supongo que más que él, y aquello lo asustó,pues me lo dijo varias veces.  Tras volver a Filandia él siguió en una actitud conflictiva, resultando con que, sin razón alguna, me boqueó de un día para otro, sin darme razones, sin decir que deseaba terminar la relación. Fui afortunado en medio del infortunio, tengo que confesar. Bien pude haber quedado enfrascado en una relación violenta, en donde yo era sólo un objeto de placer que debía estar en actitud de sumisión frente a todo. Oh, no, no soy ese tipo de persona y pese a la abrupta ruptura sin anunciar, pude dejar de lado un sentimiento que había crecido, mas no madurado lo suficiente. Tras este desenlace tan inexplicable pero razonable, conocí a alguien más. 

No, enamorarse no es un proceso que se hace en dos días, al menos no en mi caso. Esa fracasada relacion me tomó meses en aceptar. Aquel hombre me rogó por dos meses, y aun luego de aceptarlo, me tomó unos meses más en comenzar a cultivar ese sentimiento. Y eso mismo comenzó a ocurrir desp  ués, luego de esta ruptura, con alguien que, al comienzo, me prometió ser quien me enseñaría a hablar japonés. Tengo que admitir que no sé con exactitud por qué las cosas comenzaron a tomar ese rumbo, pero si tengo que confesar que me sorprendió de sobremanera en que aquel joven comenzó a acercarse a mi. Claro, físicamente es atractivo y eso influyó en cierto punto a disponer de más tiempo para hablarle, pero más allá de lo físico y de su extraordinaria sonrisa, me agradó su personalidad, o al menos la que me mostró en ese momento.

Los meses pasaron y sus palabras de amor me dejaron sin palabras. Le dije por supuesto que el amor es algo que se cultiva con el tiempo, así que no podía ir más rápido de lo que él parecía ir. Así que decidimos darnos la oportunidad de conocernos mejor, y pasé un verano junto a él. Los amores de verano suelen ser mágicos, verdad? Y si, así fue. Todo parecía perfecto, pero lo que más me gustó fue el nivel de confianza que nos tuvimos, y esa voluntad de querer estar a mi lado me hizo pensar una y otra vez si era el correcto.  La petición de matrimonio llegó desde antes de yo llegar allí, y que con el pasar de los meses acepté, no sin antes dejar en claro algunos puntos especiales e importantes que quería aclarar.


1, estaba aún en proceso de divorcio, pues ese proceso puede tomar largo tiempo en Finlandia. Aún estaba atado de alguna manera a mi ex conyugue, quien podía olviarlo todo, menos cobrarme dinero por alguna tontería.

2, el debía a su vez aclarar su asunto con la ex novia que había tenido, quien lo botó a la calle dejándolo sin nada tras 4 o 5 años de relación. Esa mujer tenía hijos, y ese punto es neurálgico para mi, y para la familia de este joven en cuestión. 

3, y algo del cual le hablé desde el primer momento que me propuso matrimonio; yo no voy a darle hijos. Razones`? Sobran a decir verdad, desde la extrema superpoblación mundial, los 2000 millones de huérfanos o engendros en condición de vulnerabilidad, hasta por razones personales como "simplemente no quiero criar una nueva vida y no me gustan los niños". Él aceptó mi posición diciendo que entonces su destino era no tener hijos aunque los deseaba, y este punto ha sido tan extremadamente importante que, a pesar de haberse hablado hace ya más de un año, sigue dándonos problemas.

De igual modo ambos aeptamos y decidimos comprometernos, su familia me recibió con los brazos abiertos (pese a no ser japonés), y nos brindaron todo su apoyo. Su padre nos regaló una casa de su propiedad en donde todos los hijos nacieron y crecieron, casa que necesita alguna remodelación, pero es hermosa. Su jefe nos regaló un auto (ya que la ex novia le quitó incluso eso), y todo parecía funcionar a una velocidad que me generó vértigo.

Tras regresar a Finlandia y luego de ese maravilloso verano todo pareció tornarse de infierno allí. Tenía demasiado trabajo, el divorcio, estudios, problemas laborales, depresión y debía ahorrar suficiente dinero para poder mudarme definitivamente. Fue duro, realmente duro, al punto de quedar "mental burnout" y tomar incapacidad médica debido a ello (tenía 3 meses para lograrlo, lol!). Sin embargo el tiempo pasó, poco a poco las situaciones y problemas se fueron solucionando, envié mis cosas a Japón y mi pareja me ayudó con el tiquete. Volver a su lado fue una enorme razon de dicha. Quería mas que nada dejar todo ese mal trago atrás, ese terrible año que me había dejado solo dolor y esa esperanza de hacer una nueva vida.  El trámite del matrimonio fue otro dolor de cabeza (típico), pero tras casi un mes de lucha logramos consumar la unión de manera legal. El siguiente proceso era obtener la visa, cosa que tomó 3 meses en ser aprobada. Sin embargo, durante esos meses de gestión comenzó una nueva página en la larga historia de desgracias en mi vida.. Y no pude volver atrás..



sábado, 3 de noviembre de 2018

L.

Luego de una muy larga pausa en la cual había perdido completamente los deseos de escribir, he regresado.  Este año no ha sido especialmente fácil, y de hecho, fue la repentina muerte de una buena amiga lo que me dejó sin deseos de nada.  Así como el común de las personas, también he dado mi adiós a diferentes personas a lo largo de la vida,  Abuelos principalmente.  Y sin embargo, ha sido esta muerte en especial la que, a pesar de haber ocurrido hace más de 6 meses, no logro superar.

Me siento culpable y estúpido, pues ella fue como una madre para mi, pero tengo tantos problemas con expresar abiertamente lo que siento, que aunque se lo dije, así como le dije que ella era como una madre para mi, no creo que fuese suficiente.  Y lamento mucho no haberla llamado unas horas antes de su muerte, puesto que, de haber sido así, le hubiera podido salvar la vida, y a cambio la llamé cuando ya nos había dejado, y se quedó allí, sola, tirada en el suelo por más de un día y con sus gatitos viéndola sin vida al lado de sus platitos de comida.  Este desafortunado suceso me ha arrastrado a reflexionar lo que he hecho, hago y podría hacer con mi vida, porque por bueno o por malo, nunca sabemos cuando nos llega la hora, y dejar una vida llena de arrepentimientos realmente me asusta.

Así que comencé una nueva etapa en la cual, he querido abrirme nuevamente al mundo.  Tras su muerte he quedaddo completamente aislado, solo, y ella ha sido la primera persona en toda mi vida que jamás me ha juzgado por hacer lo que hago, por haber hecho lo que hice.  He comenzado a usar por ello y a diario los idiomas que sé, y esto me ha ayudado a pensar de manera un poco menos desastrosa, a la vez que me ha arrastrado a caer de nuevo en la alcoholemia.  Por fortuna, he conocido una serie de personas agradables que me han ayudado a abrirme al mundo, a dejar de nuevo la depresión de lado.  Y entonces, luego de algunas despedidas y bienvenidas más en mi vida, las cosas dieron un giro inesperado.

Conocí a alguien tan constante como yo, con un caráccter que le hace contrapeso al mío, y es como si el sueño más profundo que hemos guardado en lo más oculto del corazón, se hiciera realidad.   Es un viejo sueño, quizá el primero que tuvimos desde que tenemos memoria.  Y se hizo realidad, algo que creíamos tan imposible como ganar la lotería.  Y con este sueño realizado, ha llegado una nueva etapa con una nueva encrucijada, elegir entre la realidad y ese sueño cumplido, y realmente no sé que hacer.  En este país no me falta nada; tengo estudios gratuitos, trabajo, terapias gratuitas y medicamentos subsidiados.  Aquí es posible vivir totalmente solo y sin familiares cerca, porque el gobierno ayuda en todo sentido.  Pero es esa otra parte la que me hace falta; sentirme querido, amado, acompañado, apoyado, y me basta con una sola persona, más no tengo a absolutamente a nadie cerca mío.

He hecho mis esfuerzos, y he logrado poco a poco hacer una amistad nueva aquí.  Es una buena mujer que también me ha brindado su apoyo, me alegra haberla conocido. Pero el haber sido mirado con esos ojos desbordantes de amor semanas atrás, ser tratado como una pequeña bestia sin afecto me ha hecho replantearme qué es lo que realmente necesito en mi vida.  Quién había secado mi cabello de esa manera anteriormente en la vida?  Nadie, y estos pequeños detalles que aparentemente no tienen mayor significado, para una criatura tan solitaria como yo, significa demasiado.  Vivir soñando con cosas imposibles y que de algún modo he conseguido me producen cierta sensación de  orgullo.  Haber logrado salir del infierno de mi casa a una relativa temprana edad, estar lejos de quienes son "familia", y que solo minaron mi confianza, humillaron mis sentimientos y rechazaron mi presencia.  Ahora estoy  muy, muy lejos, pero si me fuese posible cambiar de planeta, no lo dudaría y lo haría, quiero librarme de ese yugo llamado familia, librarme del contrato que firmé hace 9 años, y comenzar nuevamente desde cero, necesito una nueva oportunidad..  Necesito vivir sin arrepentimientos.

lunes, 15 de enero de 2018

XLIX

Muerto, así me siento de nuevo. Muerto, como debí haber quedado bajo el fango del dique de aquel invierno 13 años atrás. Muerto, sintiendome más solo de lo que estoy, de nuevo en un helado invierno donde sopla un viento que te congela hasta los huesos.

Más solo que estando solo, aún en las tinieblas que me acogieron al caer, arden las lágrimas que caen, como si fuesen ácido, como si fuesen veneno.  No lo comprendo, todo estaba tan bien, todo parecía estar estable, en orden, bajo control, pero es como cuando una carroza de madera se vuelca por fuera de la carretera de piedras, todo queda roto, astillado, inservible. Duele el pecho, duele el cuerpo entero, duele incluso respirar.. Alguien puede darle alguna explicación a esto? Quiero morir, y lo peor, es que no puedo.

Manos blancas, suaves, con bellas formas, esas eran las que dedicaron un año para cuidar lo que ahora desechan, indiferentes de todo lo que pueda pasar. Amaba esa suavidad que acarició mi corazón, amé ese calor suave, esa delicadeza tan increíble, la ternura que nadie en el mundo podría tener. La magnífica belleza de la timidez me había envuelto con su aroma, embriagandome, y la soledad hasta ese entonces se había esfumado. Nada es para siempre, ni siquiera esas suaves manos que cuidaron de mí alma, ahora estoy astillado, roto, solo, pero es mejor así, supongo.

Deseo gritar en este vacío en donde nadie me escucha, donde nadie está, a donde nadie llega. Por favor, necesito estar solo.. Que nadie me busque, que nadie me encuentre.. Quiero fusionarme con la oscuridad.

viernes, 6 de octubre de 2017

XLVIII.

Un día normal.  Me pregunto cómo será eso? Hace tantos años que no tengo un día normal que simplemente lo he olvidado.  Cómo se sentirá?  Últimamente he estado reflexionando al respecto, cuando tenía aquellos días soleados llenos de normalidad.  En esa época trabajaba y estudiaba, dormía poco, vivía algo atormentado, pero tenía algo que nunca más volví a tener.  No lo lamento, pero tampoco me regocijo ante ello, solo es como si hubiese tenido una vida antes y después de todo lo que ya, anteriormente, he escrito.  Justamente ahora, momento en donde lucho por seguir adelante, intento alcanzar un poco más de normalidad a mi vida. 

Actualmente estudio y trabajo también, sin embargo, tanto mis estudios como mi trabajo están por fuera de la línea de normalidad.  Mis estudios por una parte, no están considerados una carrera profesional y no están sujetos al sistema educativo oficial de este país.  Mi trabajo por su parte, no es más que por honorario, no tengo un trabajo estable, y al ser así, me genera inestabilidad.  Pareciera que, por mucho que lo intente, no podré estar en la línea de lo "normal", y aún cuando desee un trabajo formal, no podría hacerlo debido a mi medicación, tendría que dejarla, pero aún no estoy muy dispuesto a ello.

Francamente me cuesta dejar mi extraña vida, en medio de todo la vida nocturna es lo mío, tomar juiciosamente mis medicinas, asistir a terapias y hacer cosas extrañas.  Aún sigo teniendo pesadillas en donde veo a quien no quiero ver o a quienes quiero ver haciendo cosas desagradables.  No quiero salir de este mundo de media noche, pero un enorme deseo por intentar tener una vida normal hasta la muerte me trae con la misma curiosidad que tiene una polilla al ver una vela encendida; podría morir irremediablemente "quemado".

Para mi fortuna hoy en día ya no me encuentro solo, y me siento bien, cómodo, satisfecho.  Solo me falta esforzarme un poco más, y tengo ya razones de peso para hacerlo, quiero apostar a una vida futura acompañado, con trabajo y muchos buenos momentos, casi como una persona normal, aunque jamás llegue realmente a serlo.  No es fácil vivir en medio de un lugar que nadie conoce, solo habita en tu interior, que es basto, profundo, oscuro, pero que al fin y al cabo, es tu hogar.  La frialdad de éste es hermosa, el paisaje es estéril, pero brinda una paz que no puedo sentir del lado del sol.  Al fin he firmado un pacto de paz con mi destino, no voy a huir de él, tampoco voy a esperar a que alguien me rescate, me ayude, porque me di cuenta de que no lo necesito.  Necesito realmente vivir en ese paraíso oscuro, con un sentimiento pleno de melancolía por lo que no fue ni será, por lo que es y por lo que poseo.  Ya no puedo pertenecer a ningún otro lugar porque simplemente, este siempre ha sido el mío, y es hermoso, es pleno, es hermosamente negro, estoy enamorado de este sitio, y procuraré vivir siempre sintiendo orgullo del amor que nos profesamos.


martes, 12 de septiembre de 2017

XLVII.

Un cambio total, así defino mi vida en el día de hoy.  Luego de haber hecho el "viaje de mi vida" y de tener un poco más de orden con todo lo que se refiere a mi como socialmente vivo, siento una abismal transformación por donde quiera que lo vea.  Por supuesto, no es perfecto, pero he logrado mantenerme en pie sin derrumbarme, y desde luego, no ha sido fácil, pero lo estoy consiguiendo, cada vez parezco más una persona "normal", aunque jamás llegaré a serlo.

Durante el viaje pude olvidarme de cosas que me solían mantener con incertidumbre, estuve ocupado caminando, explorando, hablando y aprendiendo del entorno tan distinto que se vive en Tokyo.  Algunas veces acostado en la litera, miraba hacia las tablas de madera del segundo piso, y recordaba cuando me hallaba en la misma posición en otra litera, la de aquel maldito lugar donde tantos horrores y penas tuve que soportar, pero no sentía nada, ni siquiera esos recuerdos traumáticos podían tocarme, los veía como si fuesen una vieja película que nada tenía que ver conmigo.  A veces me preguntaba mientras caminaba qué sería en ese instante de aquellas personas que me degradaron hasta no ser nada de sus vidas, qué estarían haciendo justo en ese momento, mientras viajaba en el tren o bebía un poco de agua, y durante los últimos días de estancia allí y pese a la prohibición enfática que nos hicieron, bebí en la vivienda donde me hospedé, tenía miedo a una vuelta hacia atrás, no quería sentir el peso de sucesos negativos de vuelta a la tranquila vida que llevé por un mes, no tenía deseos de ello.

Y para mi sorpresa, al regresar a casa me sentí más liviano, como si esa maleta cargada de recuerdos también hubiera sido cargada por buena energía, y desde que volví de aquel hermoso viaje las cosas han rtanscurrido con cierta calma, algo rutinaria.  Y si, eso es lo que necesito, rutinas.  Rutinas para disciplinarme, para lograr objetivos nuevos, metas que van más allá de sueños juveniles, lograr algo tangible, algo que me genere seguridad, y creo que es ese el siguiente paso, crearme esa base para continuar adelante, y me doy  cuenta que mi mente ha cambiado.

**

Más allá de los profundos abismos de los cuales definía mi existencia en las primeras cartas que escribí, de ese profundo pozo en el cual me ahogaba constantemente sin descanso, ahora tengo alas, y aunque nunca creo poder salir de ese abismo en el cual he vivido durante los últimos 11 años, puedo volar alto, muy por encima de ese valle muerto por donde antes, decía caminar sin rumbo. No, no quiero abandonar mi morada de media noche cuando al fin he logrado enamorarme de ella, no quiero conocer de nuevo la luz, ni ser parte de ella.  Quiero dominar mis temores desde la oscuridad, seguir ganando espacio en ella, mirando al infinito sepulcral de mi espíritu manchado, aceptarme como soy y vivir en las sombras de un país oscuro y frío, así me siento mucho mejor.




lunes, 26 de junio de 2017

XLVI.

He estado un poco perdido.  Si, puede que ses deba a la notoria mejoría que he tenido desde el último cambio de medicina, puede que se deba a la estabilidad en la que parezco vivir ahora.  Estoy bien acompañado, he tenido unos días tranquilos y  sin demasiadas fluctuaciones, ha sido un buen período de tiempo.

Han pasado 11 años, y pese a seguir hundido en ese pozo, el cual ha ido perdiendo profundidad, han habido constantes sucesos positivos que, a pesar de como me había estado sientiendo, han dejado logros.  Estoy a pocos días del viaje de mi vida, creí que ese viaje sería el que hicimos hace ya 8 años, cuando nos mudamos de país, sin embargo, el viaje que estoy a punto de hacer, aunque no es para mudarme, es mucho mas grande, puesto que es un sueño compartido que ha dormido por más de 20 años en lo más profundo de nuestro ser.  No, al parecer no ha sido suficiente con todo lo que hemos hecho, nunca voy a sentir satisfacción completa, pues quiero todo el tiempo hacer más.  Esa es otra de las razones por las cuales he visto mi constante mejoría, como si en el empinado abismo al cual caí años atras,hubiese forjado un camino para mi.

No, no quiero salir de mi oscuridad eterna, me he acostumbrado a ella y he aprendido a amarla.  La luz que siempre busqué ahora brilla para mi, mostrándome el sendero, atesoro aquella luz que por meses ha permanecido en el negro horizonte de mi vida, y por primera vez en muchos años, le he encontrado un sentido a todo, incluso la razon por la que estoy aquí.  He sido maldecido tres veces, pero la oscuridad me ha bendecido con su manto de media noche, y ahora el brillo de penumbras que emana de mi interior es fuerte, estable y bueno.

Estoy agradecido, por no haber muerto asfixiado, ni ahorcado, ni degollado.  Estoy agradecido por no haber sido cortado en pedazos y lanzado a un dique, o al océano.  Estoy agradecido por sobrevivir a ese infierno en el cual, aunque fueron solo unos cuantos meses, me dejó marcado para siempre. Y esa gratitud que ahora se ha vuelto constante, me ha premiado con una nueva experiencia, y haré lo posible por disfrutarla plenamente. 

Dónde estarás tu?  Seguramente aún en esa casa, viviendo a costillas de tu madre, alimentando a la criatura que será igual o peor que tu..   Incluso los niveles espirituales nos distancian, y probablemente nos conocimos solamente para aprender una lección, nuestro karma se ha manifestado y tu viajas a un limbo eterno, en donde te vas a consumir con todo tu odio.  Entre tanto, yo seguiré mi camino oscuro, en medio de la estepa negra a la que ya le he tomado cariño, aprendiendo de ella para continuar, sin descaso.. Sin saber lo que me depara en el final.

viernes, 26 de mayo de 2017

XLV.

(Tarea de literatura..? je.)

Si alguien quisiera preguntarme por el tiempo en el cual esta bella historia se ha desarrollado, podría asegurar que ni yo mismo estoy muy seguro de ello.  Simplemente comenzó por una casualidad, nada especial, y sin embargo, es un suceso que me ha cambiado la vida.  Fue para el otoño, si, puedo recordar aquellos bellos colores que por el paisaje nórdico se pueden disfrutar, esos ocres y magentas que despuntan los pálidos troncos de abedules y y algunos abetos que hacen parte de una serie de robustos bosques que se pueden ver con tan solo dar un tranquilo paseo por los alrededores de la ciudad.  Y si, hermosos son sus ojos, tanto o más como este bello paisaje, pues esos los ojos que durante esa decadente y húmeda época del año tuve yo la dicha de conocer.

Si, fue por casualidad, como mencioné antes.  Una tarde en la cual entré al bar para tomar unos tragos y pasar el dolor del trájico final que había tenido mi vida amorosa hacía ya un tiempo.  Ese lugar no era el mejor de todos, lo sabía, había visto yo desde hacía ya unos años la gran cantidad de  disputas que allí se podían presenciar, era un "cuchitril", lo sé, pero tenía a la vez algunos amigos con quienes solía yo llorar mis penas y contar mis cortísimas dichas, y entonces, le vi.  Claro, estaba por supuesto yo acostumbrado a ver almas en pena muy jóvenes y ya con sus vidas perdidas en el alcohol, hombres que tenían una desbordante testosterona y creían que podían hacerse con cualquiera que quisieran, independientemente de si eran chicos o chicas, en su mayoría eran personas desagradables, pero contaba como bien dije más arriba, con algunas amistades que valían la pena allí.  Volviendo a aquellos ojos que me robaron el aire puedo decir que eran marrones, con unas fantásticas pestañas largas y encrespadas, de mirada tan pura como un manantial vírgen, y fue tal la sorpresa que al verle, sólo pude agachar la mirada. 

Le saludé, tal como solía saludar a mis amigos y conocidos, buscando la manera de entrar a su vida de la manera más caballerosa posible, le pregunté su origen, pero no logré ir más allá, pues su timidéz, que se me había antojado de lo más perfecta, no me permitió ir más allá.  Es cierto, había hacía un tiempo roto con una relación que me habían jurado sería duradera, por esa razón estaba seguro de estar listo para todo, menos para enamorarme una vez más.  Sin embargo, mi sorpresa fue monumental al encontrarle, y más en semejante lugar de perdición.  Con buena gana volví al día siguiente, y para mi gran sorpresa había vuelto a aparecer.  Con intentos caballerezcos me acerqué, le intentaba hablar tanto como mis demás amigos me lo permitían, sin ir más allá de lo que podía, pues ese hermoso ángel de preciosos ojos marrón contaba además con una personalidad tan suave que me impedía dar "pasos grandes".  Si, me refiero a la cercanía que poco a poco lograba ganar con él.  Y así transcurrieron días, semanas, en donde sólo podía acercarme de manera esporádica, pero cuando podía, me hacía el día, era completamente feliz, satisfecho con tan solo ver sus bellos ojos color marrón.

Pasaron entonces los meses, y luego de un día y una corta conversación, decidí dar otro paso, y darle mi número de teléfono, quería ir más allá, y mis planes con suerte, se estaban dando de una manera favorable para mi.  Si me preguntasen acerca de cómo es, cómo podría yo describiro, diría que el adjetivo más acertado para hacerlo sería "tierno", pues poseía una increíble ternura, una timidéz que podía malinterpretarse con hostilidad, pero de un corazón tan puro como el de un ángel, y así era, todo un ángel para mi.  Así pues le invité a salir, comenzamos a hablar más seguido y esto por supuesto no era suficiente para mi, me estaba gustando ya más de la cuenta, y decidí entonces llegar un día con un lindo regalo, algo que pudiera ser equivalente con su ternura, así que compré un lindo peluche de ranita y un ramo de rosas blancas.  De todo lo que hubiera podido desear en ese momento al entregarle esos regalos, su sonrisa, la cual nunca había visto, fue el mejor regalo que pude yo recibir a cambio, me había hecho nuevamente feliz, me había sacado con tan solo su sonrisa del profundo abismo oscuro y solitario en donde mi corazón se alojaba en tan solo un segundo.

Y fue así, como poco a poco comenzamos a salir, y lo que me sorprendía era que llevaba de vez en cuando consigo aquel peluche de rana que yo le había regalado, así que lo tomé como la mejor respuesta a mis sentimientos, aunque en ese momento, eran tan solo utópicos.  Y así fue como día a día nos fuimos relacionando más, sentía que el dolor que siempre me había identificado frente a todos mis amigos de aquel bar desaparecía con tan solo ver sus ojos, y añoraba en esos días con volver a ver su sonrisa.  Y aquella niebla espesa y oscura que había cubierto mi corazón por una década entera desaparecía con su sonrisa, con el tiempo que pasaba a mi lado, era definitivamente todo para mi.  Un cierto día de invierno, decidí entonces darle un beso en la mejilla, y la calidez de su piel al contacto me devolvió el aliento que había perdido al ver sus bellos ojos, lo abracé con toda la ternura que el reflejaba en mi corazón, y entonces decidí decirle lo mucho que él significaba para mi.

Si, fue un día de invierno, un primero de febrero, cuando el intenso frío que hiela hasta los huesos cuando decidí abrir mi corazón de nuevo, y para mi enorme sorpresa, recibí una respuesta inesperada; él sentía lo mismo por mi.  Y le di entonces el primer beso, cómo podría yo describirlo?  Era un beso lleno de la ternura que sólo él podía desprender, fue cálido, dulce y fantástico.  Lo abracé entonces con todos mis deseos de protegerlo, amarlo, cuidarlo y apoyarlo, como si fuera desde ese momento el tesoro que con mayor celo podía yo proteger, el se había convertido en todo para mi.

Y así pues, han transcurrido ya meses, y debo afirmar que han sido los mejores meses de mi vida; siempre a su lado, con toda la ternura que emana sólo por y para mi.  Y con sus gentiles y frías manos me sacó del averno en el cual vivía, la soledad infinita que sólo en ese abismo oscuro se puede sentir, como si me hubiese tomado la mano cuando en torpes intentos, quería del pozo infinito escapar.   Mis negros días de invierno se transformaron en una primavera inperenne, soleada y tibia, en la cual puedo salir con total libertad y lo más importante, tomando su mano.  "Pudiste tu, alma juvenil y rosagante de ternura sacarme de un tirón de mi abismo de nuevo, brindándole a esta alma en pena calor, luz, amor y consuelo".